El entrenador del Caserío asegura que lo importantes es que «la gente se sienta orgulloso de nosotros» tras la victoria frente al Burgos
Santi Urdiales, entrenador del Caserío, se ha mostrado muy satisfecho con la victoria de su equipo frente al Burgos (31-28) en la primera jornada de la División de Honor Plata. «Va a ser una temporada muy difícil, así que el principal objetivo es que la gente se sienta orgullosa de nosotros. Hay muy buena plantilla y buenos jugadores e intentaremos ser mejores cada día».
Para el preparador santanderino, «Burgos es un muy buen equipo, pero esta categoría es muy dura y cada semana va a ser una batalla», por eso pidió ser prudentes: «Habrá días que ganemos y otros que perdamos, así que hay que tener los pies en la tierra porque puedes perder con cualquiera».
El preparador del Caserío tiene muy claro que el mensaje debe ser de «humildad, trabajo y de que la gente se sienta orgullosa. A partir de ahí intentar mejorar en todo».
Entre las claves del partido, Urdiales señaló que pudo estar en el «parón en la segunda mitad, pero también en la primera mitad tuvimos buenos momentos. Lo importante es que el equipo siguió creyendo y luchando, cuando peor lo estábamos pasando nos ayudamos». De cara al futuro, el cántabro recuerda que «tenemos mucho que mejorar, pero el punto de partida debe ser un equipo luchador y que pelea y a partir de ahí creceremos».