El presidente del Caserío recuerda que el equipo aún tiene opciones de ascender y que sería muy importante organizar la fase
El Caserío Ciudad Real ya sabe que jugará fase de ascenso el fin de semana del 24-25 de mayo. Con su derrota ante el Triana el pasado sábado se esfumaban sus opciones de ascenso directo a Liga Asobal, que se decidirá en el duelo de la última jornada entre Burgos y Eón Alicante.
Dado que los alicantinos aventajan en un punto a los burgaleses, les vale hasta el empate para conquistar el liderato, mientras que a los cidianos solo les sirve vencer.
Si Burgos es el que sube, Alicante organizará la fase de ascenso. Caserío es tercero a un punto del Burgos, con el que tiene el gol average particular perdido, así que para acabar segundo necesita que pierdan los castellanos y ganar al Sinfín Cantabria en esa jornada final, programada para el sábado 17 de mayo a las 19 horas. Si Burgos y Alicante empatan, será Burgos quien organice la fase, repitiendo así sede de la pasada temporada.
Más allá de las cábalas, lo importante ahora es que la plantilla del Caserío levante la moral. «Conociendo a esta plantilla sé que en un par de días van a estar a tope», asegura el presidente del club, Julián Amores, que recuerda que para el Caserío «el ascenso directo no era una obligación. Es cierto que nos hacía mucha ilusión, pero por presupuesto y medios eran otros equipos los que están más obligados».
Amores admite que la decepción de los primeros momentos tras perder en Sevilla «es algo lógico» y no oculta que poder organizar la fase de ascenso sería muy importante para el club, para la ciudad y también para el equipo, pero eso es algo que ahora no depende de ellos mismos.
Amores recuerda que «no se ha perdido nada» y que no es el momento de ningún fatalismo. «Todavía podemos ascender y hay opciones de jugárnosla en casa. Seguro que hay muchos equipos que se cambiarían por nosotros», comentó.
Dado que esta semana hay parón por selecciones, el Caserío quiere aprovechar estos días para recuperar a jugadores que están tocados, casos de Augusto Moreno de la Santa, Jorge Romanillos o Campanario, con problemas en una rodilla. Además, Marcos Fis se concentrará con la selección absoluta y Álex Díaz con la júnior.
Su rival en la última jornada será el Sinfín Cantabria, que podría ser también su adversario en las semifinales de la fase de ascenso. Los cántabros han ganado siete de sus últimos ocho partidos y han empatado otro, por lo que es el conjunto más en forma de la Liga.
El otro equipo clasificado es el Puerto Sagunto, que jugará en semifinales con el organizador de la fase de ascenso, ya que matemáticamente acabará quinto haga lo que haga en el último partido en Antequera.