Tras el gran triunfo ante el Alicante, el equipo de Ciudad Real es cuarto clasificado a falta de dos jornadas y podría conseguir este sábado matemáticamente el billete para la segunda fase por el ascenso y sellar su objetivo de la permanencia si gana al colista Sant Quirze en casa y el Alicante cae con el líder Sagunto. Si los alicantinos no ceden, podría lograrlo dependiendo de resultados del Málaga o Ibiza.

Tras la gran victoria conseguida este miércoles ante el Alicante (28-25), el Hiros BM Caserío se ha colocado en una situación que, posiblemente ni los más optimistas, pensaban hace unas semanas. El equipo amarillo ha sumado siete de los últimos ocho puntos en juego en los cuatro partidos de 2023 tras la reanudación liguera, y, a falta de dos jornadas para el final de la primera fase, ha subido a la cuarta posición, la que pone límite a entrar en la segunda fase por el ascenso.

Eso quiere decir que, cuando restan dos fechas, el conjunto de Ciudad Real se ha ganado el derecho a depender de sí mismo para meterse en esa puja por subir a la Liga ASOBAL, lo que supondría principalmente para el equipo de Santi Urdiales sellar el objetivo marcado esta temporada, el de la permanencia. Y luego, una vez conseguido eso, soñar con algo más.

El Caserío es cuarto en solitario con 15 puntos en 14 partidos disputados. Por detrás le siguen Trops Málaga (14 puntos en 14 partidos) y Antequera (14 puntos en 15 encuentros), además de Ibiza (13 puntos en 14 partidos), únicos que podrían arrebatarle esa plaza. Además, por delante es tercero el Alicante, con 17 puntos en 15 partidos y ante el que los ciudarrealeños tienen el ‘golaverage’ ganado.

De esta forma, el Caserío podría clasificarse matemáticamente este sábado ya para el grupo de ascenso de la segunda fase. Lo hará si cumple primero con la consigna principal, que es ganar al colista Sant Quirze en el Quijote Arena (19 horas), rival que solo suma un punto, precisamente el que sacó a los amarillos en su pista. Y luego debe darse que el Alicante pierda en su pista con el líder, un Puerto Sagunto que tiene que ir a por los puntos. Con estas dos premisas, el Caserío firmaría seguro ese objetivo, ya que ambos quedarían empatados y los de Urdiales pasarían a ser terceros al haberle ganado los dos encuentros a los alicantinos, que descansarán en la última fecha.

Luego podrán darse más carambolas para conseguirlo si no cae en ese partido Alicante, como que el Trops Málaga pierda en un difícil campo como es el del filial del Barça o que el Ibiza pinche y no se imponga al Alarcos.

Así pues, este sábado se podría vivir una gran fiesta en el Quijote Arena. Al menos y con la prudencia que se está manteniendo estos días en el seno del equipo y del club presidido por Julián Amores, el objetivo primordial es ganar ese partido al Sant Quirze, dos puntos de máxima importancia en el caso de no entrar por el ascenso y tener que luchar luego por la permanencia. Luego y, si no ha clasificación matemática, habrá que jugárselo en la última jornada, en la visita al Trops Málaga.